Xi Jinping y las gemas del infinito



Brandon Young

brandon.young@erreizando.com  


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Thanos es, probablemente, uno de los villanos más conocidos -y poderosos- del Universo Marvel. Sus atrocidades pueden ser vistas en varias películas como Avengers Infinity War y Avengers Endgame, donde uno se da cuenta de la maldad de este personaje. Thanos, un Titán, se dió a la tarea de traer el balance al universo, ya que, según él, la creciente población terminaría agotando los recursos disponibles y llevando a las especies a la extinción; situación que este personaje presenció en su planeta natal “Titán”.

Para cumplir su cometido de traer balance en el universo, Thanos se embarca en una búsqueda para conseguir las Gemas del Infinito, las cuales son objetos sumamente poderosos, cada uno con diferentes cualidades. Muestra de ello, es la Gema del Tiempo utilizada por Doctor Strange para controlar el tiempo a voluntad, o la Gema de la Mente que le otorga capacidades telequinéticas a su portador, como Vision, que la utiliza en la frente. Thanos fue obteniendo una a una, y de forma violenta, las seis Gemas del Infinito, hasta colocarlas en el Guantelete del Infinito y absorber su poder.

A modo de analogía y para fines de este artículo, cada una de las Gemas del Infinito fungirá cómo una de las zonas de interés para el Gobierno chino. De este modo, podemos ver a la Gema del Tiempo como Hong Kong y a la Gema de la Mente como Taiwán, por nombrar algunas. Dichas “gemas” se traducen en zonas de interés para China, las cuales están siendo, una a una y de forma violenta, incorporadas a la esfera de influencia de China mediante una serie acciones agresivas de política exterior. En este punto, es preciso aclarar que el objetivo de esta pieza no es realizar un análisis de la política exterior china, sino más bien la de proveer un panorama amplio de las zonas estratégicas para China y sus acciones hacia ellas.

Habiendo mencionado esto, es necesario presentar a un personaje clave: Xi JinPing, quien es Secretario General del Partido Comunista Chino, y presidente de la República Popular China desde 2012. Xi Jinping ha realizado una serie de reformas en los últimos años, siendo la Reforma al Ejército chino una de las más importantes. En dicha reforma, se le otorga control total a él y al Comité Central del Partido Comunista sobre el Ejército de Liberación Popular [1]. Estos cambios le permiten tener un control absoluto sobre las Fuerzas Armadas, cruciales para desplegar sus acciones en su esfera de influencia. 

Xi Jinping. Presidente de la República Popular China

Hong Kong fue llamado aquí, “la Gema del Tiempo”, ya que es una cuestión de tiempo para que sea incorporado a la China continental. Para ser precisos, en 26 años Hong Kong dejará de ser una Región Administrativa Especial, cómo lo es actualmente, y se convertirá en una provincia más. Para comprender su situación, debemos trasladarnos unos 150 años al pasado, a las Guerras del Opio [2]. Tras la victoria de los ingleses en dicha guerra, en 1842, China cedió Hong Kong al Imperio Británico mediante los Tratados de Nankín, convirtiéndolo en una colonia. En 1898, los británicos acordaron regresar a China el territorio de Hong Kong luego de que pasaran 99 años de protectorado, dicho plazo se cumplió el 1 de julio de 1997. Por su parte, China se comprometió a otorgarle 50 años de autonomía a la isla, plazo que vence en 2047. 

Sin embargo, el gobierno de Beijing ha tomado medidas para acelerar la transición y esto no tiene muy contentos a los hongkoneses, pues su sistema no es igual al chino. Por un lado, Hong Kong goza de muchas de las instituciones democráticas que le dejó su pasado colonial inglés. Entre ellas están: un sistema legal propio, un parlamento, elecciones democráticas y libertad de expresión. Estas instituciones se ven amenazadas por las leyes de Seguridad Nacional y Extradición, las cuales le dan a Beijing la capacidad de intervenir el sistema legal de Hong Kong y extraditar ciudadanos a China para ser juzgados por sus leyes. La condición de “un país, dos sistemas” le otorga una serie de libertades a los hongkoneses que no hay en China debido a su régimen autoritario. Si te interesa conocer más de la situación que vive la sociedad de Hong Kong, te invitamos a que leas nuestro artículo “Un país, dos idiomas”. 

La siguiente “gema” que pretende incluir China en su “Guantelete del Infinito” es Taiwán. Así como con Hong Kong, es necesario remontarnos en la historia para comprender el caso de la isla. En 1911, inició la Revolución China que pretendía derrocar a la Dinastía Qing. Al siguiente año, se estableció la República China con Sun Yat Sen a la cabeza y el Kuomintang como el Partido Nacionalista. A la muerte de Sun Yat Sen, Chinag Kai-shek lo sucedió y estableció un gobierno autoritario. Posteriormente, el Partido Comunista Chino se formó en 1921 y empezó una lucha por el poder entre nacionalistas y comunistas; incluso el conflicto siguió durante la Segunda Guerra Mundial. En 1949 los comunistas triunfaron y el 1 de octubre de ese mismo año se estableció la República Popular China.  En consecuencia, los nacionalistas, liderados por Chinag Kai-shek, huyeron a la isla de Taiwán y comenzaron a gobernar de facto la República de China. 

Desde entonces, el Gobierno chino ha mostrado sus intenciones para unificar los territorios, cuestión que rechazan los taiwaneses. Beijing no reconoce la independencia de Taiwán, ya que es visto desde China como una de sus provincias y mantiene su fórmula de “un país dos sistemas”. Por su parte, el gobierno de Taipéi ha recibido el reconocimiento internacional de su existencia legal como un Estado independiente. Sin embargo, en los últimos meses se ha visto una actitud de China más agresiva en cuanto a la idea de reunificar los territorios. Durante el mes de abril de 2021, aviones militares del Ejército de Liberación Popular de China realizaron vuelos sobre la Zona de Identificación de Defensa Aérea (ADIZ) de Taiwán.

Rutas de vuelo de aeronaves del Ejército de Liberación Nacional. 20 de abril de 2021.

Taiwán es una de las pocas democracias en el continente asiático. De realizar China una incursión militar para reunificar el territorio de forma violenta, estaría añadiendo una “gema” más a su guantelete, a costa de privar a más de 23 millones de taiwaneses del sistema democrático bajo el cual han vivido por más de 60 años. Mencionaba al inicio que la “gema” en cuestión podría ser la Gema de Mente, ya que Thanos, en Avengers Infinity War, obtiene esta piedra arrancándola de la frente de Vision, quitándole la vida. A modo de analogía, China arrancaría la democracia que se vive en Taiwán. 

Otra zona de interés estratégico para Beijing es el Mar del Sur de China, también conocido como Mar de China Meridional. Países como Vietnam, Filipinas, Indonesia, Malasia, Brunei, Taiwán y China reclaman soberanía sobre ciertas islas y archipiélagos de la zona y, en los últimos años, esto ha sido causa de conflicto constante entre estos países. Para China, la importancia geoestratégica radica en el control de uno de los espacios por los que circula el 20% del comercio marítimo mundial, una zona de alta actividad económica pesquera que, además, cuenta con reservas de gas y petróleo bastante envidiables. Esta “gema”, que China incluyó dentro de sus “intereses nacionales básicos” en 2012, puede ser vista cómo la Gema del Poder, pues es aquí donde China despliega su poderío militar y naval.

Mapa del Mar del Sur de China.

El Mar del Sur de China se compone principalmente por los archipiélagos de las Islas Spratly y Parcel. En dichas islas se ha visto un incremento de la presencia naval china e, incluso, se han construido islas artificiales para alojar bases militares. Así, la superioridad tanto militar como económica de esta potencia frente a sus vecinos marítimos ha provocado una relación asimétrica, en la que China tiene el control. Para compensar sus acciones, los países del sudeste asíático han tenido que solicitar el apoyo de Estados Unidos y su Séptima Flota [3], lo que ha exacerbado las tensiones.

Como cuarta y última zona estratégica a analizar en este artículo, tenemos al Océano Índico. Éste se asocia con la Gema del Espacio contenida en el Teseracto, capaz de transportar a quien la posea a cualquier parte del universo. En este sentido, al tener esta “gema”, China tiene la capacidad de controlar el transporte de mercancías y de energéticos. Para entender la relevancia que el Océano Índico tiene para China, debemos tener en cuenta dos factores: primero, que China no es autosuficiente para suplir su demanda de petróleo —en 2018 importó el 80% de su suministro energético— y; segundo, que la mayor parte de su comercio marítimo cruza por puntos clave de este Océano. Los Estrechos de Ormuz y de Malaca son las puertas de entrada del comercio chino. De ahí la importancia de controlarlos. 

Es cierto que las zonas de interés de China van más allá de estas cuatro “gemas”. A decir verdad, solamente son la punta del iceberg. Pero es necesario, para aquellos interesados en la región del Asia Pacífico (y sobretodo en China), no perder de vista las acciones que despliega Beijing sobre estas zonas. Y sobretodo preguntarnos, ¿qué ocurrirá si China consigue añadir estas “gemas” a su “Guantelete”? y de hacerlo ¿qué cambios traería al escenario internacional? 

Debemos notar cómo el Gobierno chino habla abiertamente de sus intereses hegemónicos y demuestra acciones agresivas hacia sus vecinos. Por consiguiente, no debemos olvidar la estrategia de Xi Jinping para consolidar su hegemonía económica mediante otros mecanismos, como la Nueva Ruta de la Seda, sus intereses en el Ártico y los campos de concentración para las minorías étnicas en Xinjiang. 


Notas:

[1] Ejército de Liberación Popular es el nombre de las Fuerzas Armadas de China. Data de los tiempos de Mao Zedong y el establecimiento de la República Popular China, el 1 de octubre de 1949. Cuenta con una Marina, Fuerza Aérea y Ejército regular que dependen completamente del Partido Comunista Chino.

[2] Las Guerras del Opio (1839- 1842 y 1856 y 1860) fueron un conflicto bélico entre el Imperio Británico y China de la Dinastía Qing. Las causas de este conflicto yacen en el interés de los ingleses por abrir China al comercio. Mediante cárteles, los ingleses introducían opio a China, el cual no tardó en ser prohibido por las autoridades. El resultado de dichas guerras fueron la apertura comercial de China, la transformación de Hong Kong en colonia y la firma de los tratados desiguales con las potencias Occidentales.

[3] La Séptima Flota de la Marina de Estados Unidos surgió durante la Segunda Guerra Mundial para la campaña militar en el Pacífico. Actualmente sigue desplegada y su área de responsabilidad comprende el Océano Índico y el Océano Pacífico. La flota tiene entre 60 y 70 navíos y cerca de 300 aeronaves militares.

5 comentarios sobre “Xi Jinping y las gemas del infinito

  1. Me encantó !!! A mi parecer una excelente exposición ya que aprendí de manera amena y entretenida el poder de un país (China) sobre otros, Muchas felicidades !!!

  2. Muchas felicidades por la creatividad que imprimiste en tu explicación!! Lograste así que pudiera enterarme de muchos detalles e interesarme en las dificultades que viven las personas que habitan lugares tan alejados de nosotros. Bravo!!

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